Todo comenzó desde a semana anterior con trabajos de limpieza y compras para recibir de la mejor forma posible a los invitados. Todo mundo se divertía sanamente al principio. Todos venían medio crudos o desvelados, así que no tenían mucha energía de entrada y menos ganas de entrarle al vicio. Todo mundo pedía jugo o refresco.


Pero llego la jefa de la casa y puso orden - nadie sale de esta casa si no se acaban la botella de Tequila- y ante esta amenaza pues que comienza la fiesta mas propiamente. Las charlas comenzaron a fluir y en un momento dado todos posaron con un sombrerote mexicano, bueno casi todos. De izquierda a derecha y de arriba hacia abajo: Milena y Adrian, Fernando, Javier, Mike, Marcela, Loreto, Jonathan, Viviana y se seguro servidor.
Todos se pasaron con sus regalos pero uno super especial fue el que me dio Ely y la familia Hermosilla, que se dio a la tarea de hacer un pastel con el escudo de las poderosas águilas encima. Luego las mañanitas, el cumpleaños feliz versión normal y cumbia, y la versión Rumana. Luego una velitas que no se dejaron apagar, gracias por el chiste Jose. Y las primeras velitas que me ayuda a apagar JM. Mi primer pastel del america, mi primera fiesta de cumpleaños en el extranjero. Si que había que festejar.

Y como teníamos que festejar pues le seguimos dando a la bebida y paso o que pasa cuando tomas y tomas y no dejas de tomar. Pierdes un poco la compostura, la dicción, el equilibrio, sientes que eres super divertido, hablas cosas que sobrio nunca dirías. En fin quizás mas de uno conoce este estado y la consecuencia viene al siguiente día con la cruda fisica y moral y la pregunto necesaria- que paso, donde estoy, como llegue aquí?- al menos tenia identificadas a las dos personas que estaban despertándome, mi bebe y Josefina. Desafortunadamente no hay evidencia grafica de mi estado, asi que quedara en la memoria de quienes lo vivieron, espero no haya sido pa tanto, por cierto en la fiesta se dieron las clásicas muestras de afecto.
